¿Hacia la «vieja o nueva normalidad»?
Un mes después de mi último post , tiempo en el que me he tomado mi propio tiempo de adaptación y transición hacia los nuevos hábitos y costumbres, retomo la inspiración y un mensaje que me viene lleno de «verdad», «mi verdad, claro está».
En el territorio donde habito hemos entrado en Fase1 , y ahora puedo confirmar algo que me vengo repitiendo a lo largo de las últimas semanas:
Los humanos somos «animales de costumbres» y en 2 meses no abandonamos nuestros hábitos, tan solo acrecentamos nuestras ganas de volver a ellos. Han incrementado las ganas de volver a nuestra vieja normalidad, mientras observamos algunos cambios de una nueva normalidad tan solo «estética».
Añadir sobre el proceso de cambio, que demostrado está que el cambio nunca se produce e instala por una obligación, sino por una voluntad, trabajada y mantenida en el tiempo. Premisa que no se ha dado en esta ocasión.
¿En base a qué digo esto?
Tan sólo en base a la observación y la escucha, hazlo tú y lo observarás también.
Hoy es el primer día de apertura de las terrazas, al 50%, y de los comercios sin cita…y de otras cosas, pero me voy a basar en lo más visible y observable. Siguiendo con mi rutina de hacer la compra 1 vez a la semana y en lunes, porque hay menos gente antes de las 12’00 del mediodía, he dado un paseo hasta mi lugar habitual de compra más cercano.
Y la sorpresa, sorpresa para mí que vivo en otra mentalidad, es que las terrazas, en su 50% están ya llenas de personas disfrutando de sus cafés y refrescos, de sus tertulias sin mascarillas, disfrutando del sol y la compañía. Y es que las ganas de volver a esa antigua normalidad puede con todos los miedos.
¿Te sorprende a ti?
Pues a unos os sorprenderá y a otros nos. Depende del prisma en el que esté cada uno. El mío es de prudencia, pero en breve me veo en una terraza, pues tal como observo lo bien que se está, mi mente va recibiendo mensajes inconscientes sobre esa posibilidad cada vez más cercana, y del mismo modo que hemos pasado de no pisar la calle a pisarla sin guantes ni mascarilla en muchos casos, adentrándonos en nuestra vieja normalidad, volveremos a ocupar las terrazas sin miedos queriendo disfrutar de lo que es la vida, que para los latinos, significa socializar y a ser posible, en la calle.
Y los mensajes inconscientes trabajan en lo colectivo, pues igual que lo observa mi mente, el resto están haciendo lo mismo. (Por suerte para el sector del turismo, sector que tanta falta nos hace recuperar en este país. Por eso necesitamos tanto la vacuna, y mientras tanto, test y rastreadores para atajar.)
¿Podemos cambiar nuestros hábitos en 2 meses? Ni creo que se pueda ni que haya voluntades, y ya sabemos que la primera premisa para cambiar algo, es que haya voluntad. Añadir dada mi profesión basada en el coaching, proceso de cambio puro y duro, que 2 meses sin voluntad, sin trabajo consciente y sin seguimiento, no hay cambio posible.
Mientras tanto los sanitarios no entienden nada de lo que hacemos el resto de los humanos. Y es que la empatía es algo de lo que se habla mucho pero que practicamos poco, sobre todo cuando no vivimos la situación de gravedad en 1ª persona.
Y es que en el fondo las personas no necesitamos una nueva normalidad, sino nuestra «antigua normalidad» para volver a hacer las cosas que nos gustaba hacer. ¿Es esto una actitud inconsciente? Probablemente lo sea, y también una actitud de supervivencia, pues de esa nueva normalidad nada sabemos, y con incertidumbre no sabemos vivir.
Hoy se miden los metros de separación entre las mesas, ¿Crees que dentro de un mes se seguirá midiendo?
Lo que necesitamos para recuperar nuestra antigua normalidad son test y rastreadores, y así podremos eliminar la parte estética y recuperar aquella antigua normalidad perdida.